El Foro Económico Mundial estima que, para 2030, el 65% de los trabajos requerirán competencias digitales avanzadas.

Hemos entrado en una era donde las metodologías de aprendizaje, las necesidades educativas, y las aspiraciones profesionales se entrelazan de manera compleja, evolucionando completamente la educación.

La pandemia de COVID-19 supuso un abrupto desmantelamiento del modelo tradicional de educación deportiva, centrado en la presencialidad, pero lejos de paralizarse, el sector demostró una notable capacidad de innovación y adaptación.

Existen colaboraciones de muchos tipos, entre centos formativos similares, con fundaciones, empresas privadas… Estas colaboraciones a menudo atraen donaciones, subvenciones o acceso a recursos materiales y humanos que enriquecen la oferta educativa y laboral.

Se destaca la necesidad de medir y monitorear el aprendizaje de manera más efectiva para identificar las brechas y diseñar intervenciones adecuadas.

Os explicamos en qué consiste, las novedades para 2025 y cómo sacar el máximo provecho de estas oportunidades desde el aula virtual nabbü.

Contar con recursos en papel mejora la retención, facilita el estudio sin distracciones y refuerza la identidad de las academias.