La fatiga ocular se produce cuando los ojos se cansan debido al uso intenso de la vista. De hecho, aunque al trabajar online sea lo más común, no solo ocurre con las pantallas y dispositivos digitales, sino también en otras situaciones como conducir distancias largas. 

• Sequedad y ardor: sensación de resequedad en los ojos, acompañada a menudo de una sensación de ardor o picazón.
• Visión borrosa: dificultad para enfocar correctamente, especialmente después de largos periodos frente a la pantalla.
• Dolor de cabeza: la tensión ocular puede desencadenar dolores de cabeza, especialmente en la frente y la zona de los ojos.
• Fatiga general: sensación de cansancio e irritabilidad que puede afectar a tu rendimiento y bienestar general.

El cansancio visual es molesto. Normalmente, no es grave y desaparece cuando descansas la vista o tomas otras medidas para reducir la molestia en los ojos, por ejemplo: 

Descansos programados

Realiza pausas cortas cada 20-30 minutos para descansar tus ojos. Aprovecha para hacer ejercicio o estiramientos, te vendrán genial si trabajas desde casa.

Regla 20-20-20

Cada 20 minutos, enfoca tu mirada en un objeto que esté a unos 20 pies de distancia durante al menos 20 segundos.

Ajusta la iluminación

Asegúrate de que la iluminación de tu entorno sea adecuada para reducir el contraste entre la pantalla y el entorno. La luz solar y la fluorescencia suelen ser las más problemáticas, por lo que evitar colocar el ordenador frente a la ventana será de ayuda. 

Posición de la pantalla

Coloca la pantalla a la altura de los ojos y a una distancia de aproximadamente un brazo de distancia. También es recomendable el uso de una silla ajustable.

Uso de filtros de luz azul

Considera utilizar filtros de luz azul en tus dispositivos para reducir la fatiga ocular, o usar gafas que bloquean la luz azul.

Parpadeo consciente

Muchas personas suelen parpadear con menos frecuencia al realizar trabajos en ordenador comparado con otras actividades. Recuerda parpadear regularmente para mantener la humedad en tus ojos.

Hidratación

Bebe suficiente agua para mantener una buena hidratación, lo que puede ayudar a prevenir la sequedad ocular. ¡Mantén tu botella de agua cerca!

Ejercicios oculares

Realiza ejercicios de estiramiento ocular para aliviar la tensión y mejorar la circulación. Este vídeo de youtube te puede ayudar. 

Descanso nocturno

Prioriza un sueño de calidad para permitir que tus ojos se recuperen adecuadamente durante la noche. Para ello, es importante alejarnos de las pantallas antes de dormir para no interferir con la producción natural de melatonina de su cuerpo.

Consulta a un profesional

Si experimentas síntomas graves o persistentes, no dudes en consultar a un oftalmólogo para recibir orientación personalizada.

Las clases online y las videoconferencias están a la orden del día en educación. Esto ha motivado algunos problemas a los profesionales de la educación, como dificultades para separar la vida real de la virtual, o el agotamiento del uso de plataformas educativas o Aulas Virtuales, en las que incluyen todo para ofrecer formaciones online, incluyendo las videoclases. 

La Universidad de Stanford ha realizado un estudio que indica algunas de las consecuencias que produce esta fatiga así como algunas de las posibles soluciones para tratarla:

Contacto visual excesivo

Durante las clases online los ojos están continuamente fijos en la pantalla, lo que provoca mayor fatiga visual. Esto ocurre debido a que el contacto visual es poco natural: en las clases presenciales, los participantes tienen la oportunidad de tomar descansos visuales al mirar notas, el reloj o concentrarse en la persona que está hablando. Para evitar esta sensación, se recomienda no utilizar la pantalla completa y tener un teclado separado del monitor para dar más espacio personal.

Fijar la mirada continuamente en uno mismo

Una práctica común en las videoclases, sobre todo al principio, es la de mirarse constantemente a uno mismo. Sin embargo, esto puede tener efectos negativos por fijar la mirada en un punto de la pantalla, además de la poca interacción que puedes tener con los alumnos. Una solución a esto sería desactivar la función de visualización de uno mismo para aquellos que estén liderando la conferencia. 

Mayor carga cognitiva

Las clases online limitan la comunicación no verbal. Esto implica que las personas necesitan hacer un esfuerzo adicional para entender a los demás sin tener acceso a gestos, miradas u otros signos no verbales que faciliten la comprensión del mensaje. Una solución sugerida es apagar la cámara por un tiempo y utilizar solo el audio, permitiendo así que tanto la mente como el cuerpo descansen de la pantalla. Aunque en nabbü esta opción no la recomendamos, ya que valoramos la importancia de la empatía y cercanía que genera la cámara encendida en las clases en directo. Lo que proponemos es ocultar tu misma imagen en la pantalla, pero que los alumnos sí puedan verla.

Para superar la fatiga de pantalla cuando trabajas online también es importante que hagas un uso adecuado de los dispositivos digitales que te rodean. Y, si eres profesor online, recomendamos llevar a cabo los consejos explicados anteriormente para poder disfrutar del resto de beneficios que ofrece la formación online y la digitalización.